Los 4 pasos que debes seguir para crear la escaleta de tu novela

Tanto si eres escritor de brújula como de mapa, necesitas esbozar una escaleta de tu novela. Pero ¿Qué es una escaleta? ¿Es realmente necesaria? ¿Cómo esbozo la de mi novela? Sigue aquí conmigo y te resolveré todas tus dudas

1. ¿Qué es una escaleta?

Escaletas hay de muchos tipos, formatos y colores pero todas tienen en común su función: sirven para desgranar la trama de tu novela y dividirla en capítulos o partes. Con ella, puedes, antes de empezar a escribir tu novela, determinar cuántos capítulos va a tener tu obra y trabajar el desarrollo de la tensión dramática, la evolución de los personajes y los giros argumentales. Repito, todo antes de empezar a escribir tu primer borrador.

Es una herramienta esencial para autores de mapa pero, si eres de brújula, no tienes que saltarte este paso. Antes de empezar a escribir, tendrás que determinar, como mínimo, algunos puntos esenciales por los que debe pasar tu narración. Una escaleta te ayuda a tener siempre en mente las distintas escenas por las que tu novela tendrá que pasar para desarrollarse como deseas. No te olvides de la escaleta o podrás desviarte demasiado del eje de tu novela.

2. ¿Cómo crear tu escaleta?

Formas de hacer escaletas hay a millones. Todas diferentes pero igual de válidas. Te voy a explicar qué pasos sigo yo misma para esbozar la escaleta de mis historias pero tienes que adaptarlo a tu forma de trabajar y a cómo estés más cómodo.

1. Puntos esenciales.

Lo primero que esbozo son los puntos necesarios para que la trama y los personajes avancen en la dirección que deseo. Aquellos giros argumentales vitales para dirigirlo todo a un final concreto. Normalmente lo primero que esbozo es el planteamiento del problema, el inicio de la trama argumentativa, y la solución que se da a este, es decir, el final. A partir de ahí, colocó toda una serie de escenas que mis personajes necesitan para ser guiados hacia ese final deseado. Un escritor de brújula podría quedarse en este punto.

2. Escenas de unión.

A continuación, esbozo lo que une un momento esencial a otro. Pongamos un ejemplo. Imagina que estoy esbozando la escaleta de una historia en la que tengo los siguientes puntos esenciales: encuentran un arma mágica, un grupo de ladrones se la roba y uno de los protagonistas sacrifica su vida para recuperarla. Tendré que determinar qué sucede entre que encuentran el arma y se la roban. Todo en términos muy generales. Por ejemplo, podrían estar dirigiéndose a la capital para entregársela al rey. En ese trayecto, se topan con una emboscada que logran pillarles desprevenidos y robarles el arma. En este punto, tienes un planteamiento, un hilo conductor que une todos tus puntos esenciales de forma coherente y lógica.

3. Dividir la trama argumentativa en capítulos.

Después del punto anterior, tendrás toda la trama de tu novela explica en términos muy generales. En este punto tienes que dividirlo todo en los capítulos que posteriormente formará tu novela. Pronto tendrás una entrada dedicada exclusivamente a cómo abrir y cerrar capítulos para llamar la atención del lector, pero veamos ahora algunos consejos.

• Cada capítulo tiene que tener algo de acción que ayude a avanzar la trama. Ni se te ocurra llenar un capítulo de explicación del worlbuilding o únicamente interacción entre los personajes. Aburrirás al lector pues la trama no avanzará a buen ritmo.
• Es aconsejable cerrar los capítulos en un momento llamativo de la acción. Así causarás interés en el lector para que siga leyéndote.
• Debes intentar que los capítulos tengan, más o menos, la misma extensión. Es un error común, a la hora de hacer la escaleta, encerrar en los capítulos una escena determinante que, a la hora de ponerla por escrito, queda demasiado larga en comparación con el resto de capítulos. No tengas miedo a dividir escenas esenciales en dos capítulos o más.

4. Especifica qué y quién pasa por tus capítulos

Este punto estoy empezando a saltármelo, pero muchos lo necesitan para evitar el bloqueo de escritor cuando se enfrentan a la hoja en blanco. Después de dividir la trama argumentativa en los distintos capítulos que compondrán tu novela, explicándolos con una descripción general de lo que ocurre, muchos optan por especifica qué ocurre exactamente en ese capítulo y, además, qué personajes aparecen en él.

Pongamos un ejemplo para que lo veas más claro. Siguiendo con la pauta esbozada más arriba, tenemos el capítulo en el que unos ladrones emboscan a nuestro grupo de protagonistas y consiguen robarle el arma mítica. Este capítulo en concreto se narraría la emboscada y el robo, esta es su descripción general, pero pasamos ahora a especificar cómo se desarrolla acción:

• Todos duermen excepto Aegon, que está montando guardia, con la espada mágica colgada en su cinto. Oye ruido en unos arbustos y se acerca a mirar qué lo ha provocado.
• Al acercarse, le saltan encima. Intentan acallarle pero logra gritar y despertar a los demás.Todos se levantan asustados y toman sus armas para enfrentarse al enemigo.
• Pero han derribado a Aegon y le han quitado la espada. El ladrón huye mientras sus compañeros pelean.
• El grupo se enfrenta a los ladrones, hasta encontrar a Aegon derribado en el suelo, ensangrentado y este les confiesa que le han robado la espada.

Así, teniendo la trama del capítulo esbozada en la escaleta será mucho más sencillo enfrentarse a la hoja en blanco; pues simplemente debes seguir la trama que tú mismo te has impuesto.

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Y eso es todo por hoy. Es muy importante recordar que la escaleta no es algo inalterable. Si a medida que vas desarrollando tu borrador sientes que la escaleta no termina de encajar correctamente, sólo tienes que modificarla y adaptarla a cómo te lo pida la trama y los personajes.

Cuéntame, ¿qué patrón sigues para esbozar tus escaletas?

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